La cirugía bariátrica ha demostrado ser una herramienta eficaz no solo para reducir el exceso de peso, sino también para mejorar significativamente la salud en general. Sus beneficios van mucho más allá de la pérdida de peso, ya que puede mejorar y, en algunos casos, revertir diversas enfermedades asociadas a la obesidad.
A continuación te explicamos algunas de las enfermedades relacionadas con la obesidad que se pueden mejorar tras una cirugía de obesidad.
Diabetes tipo 2
Uno de los beneficios más destacados de la cirugía bariátrica es su capacidad para mejorar el control de la diabetes tipo 2. Varios estudios han demostrado que, en muchos casos, los pacientes pueden reducir o incluso eliminar la necesidad de medicación tras la cirugía. Al reducir la resistencia a la insulina y mejorar el metabolismo del azúcar, la cirugía puede llevar a una remisión prolongada de la diabetes, algo que difícilmente se logra solo con medicamentos y cambios en el estilo de vida.
Hipertensión arterial
La hipertensión es otra de las enfermedades que se benefician de la pérdida de peso inducida por la cirugía bariátrica. Al reducir la grasa corporal, especialmente la grasa visceral que rodea los órganos, la presión sobre los vasos sanguíneos disminuye, lo que contribuye a mejorar la circulación y reducir la presión arterial. Muchos pacientes que se someten a la cirugía experimentan una reducción en la necesidad de tomar antihipertensivos, mejorando su calidad de vida.
Problemas articulares
El exceso de peso ejerce una presión constante sobre las articulaciones, especialmente las rodillas y las caderas, lo que puede llevar a la osteoartritis y al dolor crónico. Al reducir el peso corporal, la cirugía bariátrica disminuye esta carga, lo que se traduce en menos dolor y una mejor movilidad. Esto no solo mejora la calidad de vida, sino que también facilita la realización de actividad física regular, lo que contribuye aún más al bienestar general.
Apnea del sueño
La apnea obstructiva del sueño, un trastorno que provoca pausas en la respiración durante el sueño, es común en personas con obesidad. La acumulación de grasa en la zona del cuello y la garganta puede obstruir las vías respiratorias. Tras la cirugía bariátrica, la pérdida de peso alivia esta presión, permitiendo que los pacientes duerman mejor y reduciendo la necesidad de usar dispositivos como la CPAP (presión positiva continua en las vías respiratorias).
Enfermedad del hígado graso no alcohólico
El hígado graso no alcohólico es una afección que puede progresar a cirrosis si no se trata. La cirugía bariátrica, al reducir la grasa corporal, también disminuye la cantidad de grasa en el hígado, mejorando su función y previniendo complicaciones graves.
La cirugía bariátrica no solo ayuda a las personas a alcanzar un peso más saludable, sino que también mejora y resuelve muchas enfermedades asociadas con la obesidad. Si bien la cirugía no es una solución mágica, puede ser una herramienta valiosa para quienes han intentado perder peso sin éxito a través de otros métodos. Consulta a nuestros especialistas en Cirugía General Canarias y te asesoraremos sobre los importantes beneficios que pueden tener para usted llevar a cabo una cirugía de la obesidad.
